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Qué hacer y qué no hacer al despedir empleados

Publicado en 5 de abril de 2023

La decisión de despedir a un empleado es un proceso emocional para todos los implicados. Sin embargo, proporcionar a los antiguos empleados servicios de recolocación puede hacer que la transición sea más suave y menos estresante. En Career Partners International, nuestros servicios de recolocación ofrecen apoyo y recursos a las personas que buscan un nuevo empleo. Si usted es uno de los directivos o ejecutivos que se enfrentan al despido de un empleado, aquí tiene algunos consejos que debe tener en cuenta a la hora de despedirlo.

Hacer: Ofrecer servicios de recolocación

Este es el paso más importante. Explique a su empleado los servicios disponibles y hágale saber lo beneficiosos que son y durante cuánto tiempo puede aprovecharlos. Explíquele que usted y la empresa se comprometen a ayudarle durante la transición. Aliviará parte del estrés y la ansiedad y ayudará a mantener la moral de los empleados que se queden. 

No lo hagas: Apresurar el proceso

No apresure los servicios de transición profesional. Dé a los empleados tiempo suficiente para procesar la noticia y adaptarse a los cambios. Muchos empleados pueden tener que tomar decisiones vitales importantes con sus familias y parejas. Darles tiempo suficiente garantiza que estén emocionalmente preparados para aprovechar los servicios de recolocación disponibles.

Hazlo: Sea transparente

Sea franco con sus empleados sobre el despido y las razones del mismo. Hablar del tiempo no ayudará a que la conversación progrese, pero una explicación clara de la reestructuración o reducción de plantilla ayuda a los empleados a entender que su despido no es personal. 

No lo hagas: Hagas promesas que no puedas cumplir 

Sea realista sobre los servicios de recolocación que puede ofrecer. No hagas promesas que no puedas cumplir, como garantizar un puesto de trabajo. Dañarás la confianza entre la empresa y los empleados.

Hacer: Mantener la comunicación

Mantenga abiertas las líneas de comunicación con sus empleados durante todo el proceso. Infórmales periódicamente del estado de los servicios de recolocación y de lo que pueden esperar a continuación.

No lo hagas: Despreciar las emociones 

Perder un empleo es un acontecimiento vital importante, y los empleados reaccionarán de forma diferente. En lugar de ignorar la situación, reconozca y valide sus emociones y bríndeles el apoyo emocional que necesiten.

Hacer: Personalizar la ayuda

Adaptar la oferta servicios de transición profesional a las necesidades individuales de cada empleado. Un directivo de nivel medio tendrá requisitos diferentes a los de un ejecutivo de nivel C. Asegúrese de que sus empleados aprovechan al máximo los servicios manteniéndolos pertinentes y específicos para sus habilidades, experiencia e industria.

No lo hagas: Proporcione apoyo irrelevante 

No proporcione apoyo irrelevante o genérico que no sea específico para el empleado. El apoyo trivial no ayuda a nadie. Es una pérdida de dinero de la empresa y hará que los empleados se sientan poco preparados.

Hazlo: Tener en cuenta al personal restante

Los despidos son duros para los despedidos, pero también lo son para los que se quedan. Una vez finalizado el proceso, es casi seguro que se produzca un descenso de la productividad de los empleados que se quedan. Supera este tramo difícil con un plan. Infórmeles de las oportunidades de retención y desarrollo a las que tienen acceso y anímeles a aprovecharlas. 

No lo hagas: Olvide la reputación de la empresa 

Los recortes de plantilla pueden dañar la reputación de una marca si no se gestionan correctamente. Incluso las empresas más grandes aparecen en los titulares por despedir a empleados de forma insensible. Gestione el proceso de recolocación con profesionalidad y respeto para evitar dañar la reputación de la empresa. Y lo que es más importante, recuerde que sus empleados son personas y merecen ser tratados con dignidad.

Hazlo: Ir con un plan

Cuando te prepares para hablar del despido con un empleado, debes estar preparado. Eso significa que debe tener a mano toda la documentación e información que necesita, incluida su carta de despido, la documentación de COBRA, un paquete de indemnización por despido, si procede, y un sólido conocimiento de los criterios legales que debe cumplir al despedir a un empleado. Cuanto más preparado y capacitado esté, más confiado se sentirá su empleado con sus sugerencias. 

Despedir a un empleado es estresante para todas las partes. Durante todo el proceso, la atención debe centrarse en el empleado y en la mejor manera de apoyarle. En CPI, nuestro servicios de recolocación son un componente esencial del proceso de reestructuración o reducción de plantilla de una empresa. Proporcionar apoyo y recursos a los empleados a lo largo de este proceso les ayuda a realizar con éxito la transición a nuevas oportunidades laborales. Para obtener más información sobre las oportunidades de recolocación en CPI, Contacte con nosotros.

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